
El rector de la Universidad Nacional de La Pampa (UNLPam), Oscar Alpa, junto con los sindicatos de docentes y no docentes, han alzado una voz de alerta respecto a la crisis financiera que enfrenta la institución.
Señalan que están recibiendo un 30% menos de recursos mensuales para su funcionamiento en comparación con diciembre del año pasado, lo que plantea un futuro incierto para las universidades públicas en Argentina, especialmente bajo las políticas de ajuste implementadas por el gobierno de Javier Milei.
En una conferencia de prensa realizada el viernes, Alpa mencionó la preocupación por la reducción de recursos que afecta la capacidad operativa de la universidad. La situación se ha agravado por los aumentos salariales muy por debajo de la inflación y la falta de convocatorias a paritarias desde el año pasado.
En respuesta a esta crisis, la UNLPam ha decidido otorgar un bono de 100 mil pesos para las categorías salariales más bajas de su personal, tanto docente como no docente, aunque esto es solo un paliativo que utiliza fondos destinados a gastos operativos.
Alpa destacó que, sin una mejora en la asignación de recursos, la viabilidad de la universidad y del sistema universitario en general estaría comprometida. También hizo énfasis en la desaparición de becas para estudiantes y en la preocupante situación de la investigación científica y técnica, que es vital para la función de la universidad.
El rector se mostró crítico hacia el gobierno, señalando que han sido un "gran bluff" comunicacional las auditorías a las universidades, las cuales históricamente han sido auditadas sin que se hayan presentado denuncias contra ellas. Reiteró que el sistema universitario argentino cuenta con mecanismos internos de control que garantizan su transparencia y autonomía.
Finalmente, lamentó la pérdida de institucionalidad en el país, en referencia a los nombramientos de jueces y las acciones legislativas que a su juicio socavan el funcionamiento del sistema democratico y los derechos universitarios. Afirmó que la UNLPam, junto con otros actores del sistema educativo, continuará luchando por los derechos de la comunidad universitaria y la defensa de la educación pública en Argentina.